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Tumor en la hipófisis: diagnóstico

¿Cómo se diagnostican los tumores hipofisarios?

Si el proveedor de atención médica considera que podría tener un tumor en la hipófisis, necesitará determinados exámenes y pruebas para confirmarlo. El proceso comienza con algunas preguntas por parte del proveedor de atención médica. Le preguntará acerca de su historia clínica, de los síntomas que tiene, de los factores de riesgo y sobre los antecedentes familiares de la enfermedad.

Le hará una evaluación médica completa. Esto incluye una exploración física completa, un examen neurológico, análisis de sangre y de orina y pruebas de la vista. Con esos exámenes, el proveedor de atención médica decide si necesita más pruebas.

¿Qué pruebas podría necesitar?

Si se sospecha que tiene un tumor en la hipófisis, es probable que deba hacerse una o más de las siguientes pruebas:

  • Análisis de sangre o de orina

  • Muestra de sangre venosa

  • Pruebas de diagnóstico por imágenes

  • Biopsia (a menudo se hace como parte del tratamiento)

Análisis de sangre o de orina

El tipo de análisis que se haga depende de lo que el proveedor de atención médica detecte durante la historia clínica y la exploración física. Hay pruebas para medir los niveles de distintas hormonas en la orina o en la sangre. Así, el proveedor de atención médica puede determinar qué tipo de tumor hipofisario podría tener. Algunos análisis de sangre deben hacerse en determinados momentos del día. Quizás tenga que recolectar la orina en un recipiente grande durante un período de 24 horas. 

Muestra de sangre venosa

La muestra de sangre venosa (muestreo de senos petrosos inferiores) es una prueba especial que podría hacerse si tiene un nivel alto de la hormona ACTH (corticotropina) en sangre, pero la resonancia magnética es normal. Los tumores hipofisarios que producen la ACTH pueden ser demasiado pequeños y no aparecen en una resonancia magnética. Con esta prueba se pueden detectar estos tumores. Para la prueba, se le administra un sedante y, luego, se introducen unos tubos largos y diminutos (catéteres) en las venas dentro de cada muslo interno a través de unos cortes pequeños. Los tubos se guían hasta las venas que drenan la sangre a cada lado de la hipófisis. Se toman muestras de sangre de ambos lados y se verifican los niveles hormonales. Luego, se coloca en la sangre una hormona que causa que la hipófisis produzca ACTH. Se toman más muestras de sangre para ver si el nivel de ACTH sube mucho o es más alto en un lado de la hipófisis. Si esto ocurre, la causa es probablemente un tumor hipofisario.

Pruebas de diagnóstico por imágenes

Resonancia magnética

En la resonancia magnética, se usan imanes grandes, ondas de radio y una computadora para tomar imágenes tridimensionales del interior del cuerpo. La resonancia magnética es la mejor prueba de diagnóstico por imágenes para detectar todos los tipos de tumores en la hipófisis. También permite a los cirujanos decidir qué tipo de cirugía hacer para extirpar el tumor si es necesario.

Antes de la resonancia magnética, es posible que le coloquen en la sangre una sustancia especial llamada gadolinio a través de una vena. Con el gadolinio, se logra más claridad en las imágenes de modo que se puedan ver hasta los cambios pequeños.

Durante la prueba, debe permanecer acostado en una camilla angosta mientras esta se desliza dentro de un escáner en forma de tubo largo y estrecho. Si siente incomodidad en los espacios pequeños (claustrofobia), es posible que necesite un medicamento (sedante) para relajarse antes de la prueba. La duración total de la prueba puede ser de una hora o más, pero la toma de cada imagen lleva solo unos minutos. Debe quedarse muy quieto mientras se toman las imágenes. La resonancia magnética no duele, pero es ruidosa. Puede pedir auriculares y música o pedir tapones para los oídos.

Tomografía computarizada

En la tomografía computarizada, se hacen radiografías desde distintos ángulos a medida que una cámara se mueve a su alrededor. Se combinan estas imágenes en una computadora para crear imágenes detalladas del interior del cuerpo. Esta prueba se usa si no puede hacerse una resonancia magnética porque tiene un marcapasos u otro dispositivo metálico implantado.

Durante la prueba, se acuesta en una camilla mientras esta se desliza por el centro del tomógrafo en forma de aro. La tomografía computarizada no duele. Pero, durante la exploración, deberá permanecer quieto y puede que le pidan que contenga la respiración algunas veces en ciertos momentos.

En esta prueba, es posible que le coloquen un medio de contraste especial en una vena. El medio de contraste permite al proveedor observar ciertas partes del cuerpo con mayor claridad. El contraste pasa a través del cuerpo y sale con las evacuaciones intestinales. Cuando se inyecte, es posible que sienta una sensación de calor desde el tórax hasta la ingle. Antes de hacerse la tomografía computarizada, informe al proveedor sobre cualquier alergia que tenga o si alguna vez tuvo una reacción al medio de contraste. Entre las reacciones, se incluyen urticaria, dificultad para respirar o acalorarse de forma repentina. Pueden administrarle medicamentos antes de la prueba para prevenir este tipo de reacciones.

Biopsia de tejido hipofisario

Es pocos casos es necesaria una biopsia antes de tratar un tumor en la hipófisis. La biopsia consiste en la extirpación de una porción pequeña de tejido (que se llama muestra) del tumor para su análisis. Mediante la biopsia, el proveedor de atención médica puede determinar qué tipo exacto de tumor hipofisario tiene y si es canceroso. Las biopsias de los tumores en la hipófisis se hacen por lo general como parte de la cirugía para extirpar el tumor. Esto se debe a que las resonancias magnéticas de alta resolución y los análisis hormonales de sangre detallados funcionan muy bien para diagnosticar un tumor hipofisario. 

Obtención de los resultados de las pruebas

Los resultados podrían tardar unos días en llegar. Cuando el proveedor de atención médica tenga los resultados, se contactará con usted. Pregunte cómo puede conocer los resultados de las pruebas. ¿Será a través de una llamada telefónica o deberá programar una cita médica?

El proveedor hablará con usted acerca de otras pruebas que pueda necesitar si se detecta un tumor en la hipófisis. Asegúrese de entender los resultados y lo que debe hacer a continuación.

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