Calmantes comunes

Para controlar el dolor en los cuidados paliativos, los medicamentos que suelen usarse son los opioides. Estos medicamentos incluyen la morfina, la oxicodona, el fentanilo, la hidromorfona, el levorfanol y la metadona.

¿Por qué es importante controlar el dolor?

Controlar el dolor es esencial para mejorar la calidad de vida. El dolor impide que las personas hagan actividades que disfrutan. Puede impedir que hablen y pasen tiempo con los demás. Puede afectar el estado de ánimo y la capacidad para pensar. Además, el dolor puede causar dificultades para comer y dormir, lo que puede empeorar otros síntomas. El dolor causa angustia y sufrimiento a los pacientes y sus seres queridos. También aumenta la presión arterial, la frecuencia cardíaca y puede afectar la recuperación de manera negativa. Controlar el dolor ayuda a aliviar el sufrimiento.

¿Cómo se controla el dolor?

El control del dolor se realiza mayormente con la ayuda de medicamentos. Los medicamentos para el dolor (analgésicos) funcionan mejor si se toman regularmente de acuerdo con un cronograma. No se debe esperar hasta que el dolor se vuelva intenso para tomarlos. El plan para controlar el dolor puede incluir más de un tipo de analgésicos. Quizás se administren distintos tipos de medicamentos con el tiempo para ver cuál de ellos funciona mejor. Pueden administrarse de muchas formas. Estos incluyen un goteo intravenoso, una pastilla, un líquido por vía oral o un parche. Pueden cambiarse las dosis para asegurar la máxima eficacia. El cuerpo puede acostumbrarse a un medicamento, por lo cual se requerirá aumentar la dosis con el tiempo. Esto se llama tolerancia. Es normal dentro del control del dolor en los cuidados paliativos. Tal vez no se pueda eliminar el dolor por completo. Pero en muchos casos los medicamentos aportan un alivio considerable.

Inquietudes sobre los medicamentos para el dolor

El uso de analgésicos podría hacerle surgir muchas preguntas. En las noticias se publican artículos de personas adictas a los analgésicos. La adicción surge cuando se sigue usando un medicamento aunque ya no es necesario. Este problema no afecta a las personas que están recibiendo cuidados paliativos. Puede ocurrir que se necesiten analgésicos hasta el momento de la muerte. Quizás le preocupe también que los medicamentos para el dolor acorten la vida. Esto generalmente no es verdad. También podría preocuparle la posibilidad de que los analgésicos adormezcan a una persona hasta el punto de impedirle hablar. Se procederá con sumo cuidado para tratar el dolor y a la vez asegurar que la persona se mantenga lo suficientemente alerta como para hablar con su familia. En los cuidados paliativos, el control del dolor se realiza cuidadosamente para evitar problemas.

Control de los efectos secundarios

El proveedor de atención médica explicará los posibles efectos secundarios de estos medicamentos. Algunos de estos efectos son estreñimiento, picazón, malestar estomacal (náusea), vómitos, cansancio extremo (fatiga) o confusión mental. La mayoría de estos efectos desaparece después de un corto tiempo. Le darán tratamiento para esos síntomas.

Otras maneras de tratar el dolor

Hay otras maneras de aliviar el dolor. Estas pueden usarse junto con los analgésicos. Consulte al personal de cuidados paliativos sobre las siguientes técnicas:

• Visualización guiada

• Toque o tacto terapéutico

• Acupuntura

• Masajes

• Terapia con mascotas

• Terapia musical o artística

• Terapia con calor y frío

• Medicamentos de venta libre, como el paracetamol y los antinflamatorios no esteroides (AINE)

El papel del paciente

Usted desempeña un papel fundamental en el control de su dolor. Esto incluye:

• Notificar al personal de cuidados paliativos cuando sienta dolor. Si expresa claramente que tiene dolor, al personal le será más fácil tratarlo.

• Informar al personal de cuidados paliativos acerca de los efectos secundarios que usted tenga.

• Llevar un registro del dolor. Anote la intensidad de su dolor y el momento en el que aparece. También debe anotar los medicamentos que tomó. Esto ayuda a que el personal de cuidados paliativos se los ajuste según sea necesario.

• Tomar los medicamentos según las indicaciones. Si espera demasiado para tomar el analgésico, el dolor será más difícil de controlar. Quizás hasta haga falta aumentar la dosis.

El papel de los familiares

Quizás le resulte difícil entender cómo se siente su ser querido. Pero el dolor que padece es real. Y usted puede ayudar. Puede ayudar a su ser querido registrando el dolor en un diario. Asegúrese de que los medicamentos se le administren puntualmente. No guarde los analgésicos ni espere para dárselos a su ser querido. Esto puede causarle mayor dolor y síntomas de abstinencia. Los analgésicos surten su máximo efecto si se toman a un horario regular, antes de que el dolor se intensifique. Recuerde que el alivio eficaz del dolor es una parte esencial de los cuidados paliativos. Permite que su ser querido tenga la mejor calidad de vida durante el tiempo que le queda.